Cuando pensamos en falsificaciones pensamos en cuadros de Picasso o bolsos de marca, pero existen otros productos atractivos para quien quiere lucrarse de modo fraudulento. Entre ellos, figuran los medicamentos, cuya falsificación no sólo engaña al bolsillo del estafado sino que comporta un grave problema de salud pública ya que estos no llevan el principio […]
Cuando pensamos en falsificaciones pensamos en cuadros de Picasso o bolsos de marca, pero existen otros productos atractivos para quien quiere lucrarse de modo fraudulento. Entre ellos, figuran los medicamentos, cuya falsificación no sólo engaña al bolsillo del estafado sino que comporta un grave problema de salud pública ya que estos no llevan el principio activo.
Los medicamentos falsificados son una amenaza preocupante a nivel mundial, y la delincuencia organizada está cambiando el negocio de estupefacientes por el de medicamentos falsos.
Confirman que las falsificaciones conforman un grave problema de salud pública ya que estos fármacos no llevan el principio activo adecuado o bien es sustituido por substancias peligrosas para la salud.
El problema se está extendiendo a escala mundial porque ya es un negocio de grandes dimensiones del cual se lucra la delincuencia organizada, la misma que trafica con drogas.
Los traficantes están muy interesados en este negocio, ya que los beneficios son muy elevados. Pero la industria farmacéutica ya lucha contra los medicamentos falsos que pueden, incluso, llegar a matar en casos donde un enfermo confía en que se está medicando correctamente cuando, en realidad, no es así.
Fuente: noticiasdelaciencia.com