El ácido tánico es un ácido polímero de moléculas, compuesto de glucosa, ácido gálico y ácidos fenólicos. Se presenta como un polvo amorfo, ligero, con un tono entre amarillo y marrón, el cual tiene un sabor astringente, no amargo. Es soluble en agua, alcohol y acetona, aunque es casi insoluble en benceno, éter y cloroformo. […]
El ácido tánico es un ácido polímero de moléculas, compuesto de glucosa, ácido gálico y ácidos fenólicos. Se presenta como un polvo amorfo, ligero, con un tono entre amarillo y marrón, el cual tiene un sabor astringente, no amargo. Es soluble en agua, alcohol y acetona, aunque es casi insoluble en benceno, éter y cloroformo.
El ácido tánico se puede elaborar artificialmente, aunque naturalmente, se encuentra en el vino tinto, en el té, en el café, en las pasas negras, en las guayabas y en las espinacas.
Este ácido tiene propiedades astringentes y antioxidantes, pero debe de ser consumido con moderación, ya que de lo contrario, puede dificultar la absorción de hierro y de las proteínas y en cantidades excesivas, puede destruir las células de la piel, producir insuficiencia hepática y puede causar la muerte.
Usos y Aplicaciones:
Aplicaciones en el ramo médico:
- Astringentes intestinales.
- Astringente en dermatología.
- Tratamiento de quemaduras.
- Antídoto de los alcaloides y de algunas sales metálicas.
Usos en la Industria:
- Compuestos barnizadores de cocinas.
- Desnaturalizador del alcohol.
- Galvanoplastia y galvanizado.
- Curtido de pieles.
- En tintas.
- Mordiente y fijador de tejidos.
- Agente de clarificación en la elaboración de vinos y cerveza.
- Fotografía.
- Estabilización de la oxidación de objetos de hierro.
- Encolado y mordiente para papel.
Fuente: Ecured